Saber dónde aplicar perfume es sumamente importante para que tu fragancia dure más tiempo y se perciba de manera equilibrada durante el día. Y ojo, que no es cuestión de rociar sin control, sino de elegir las zonas estratégicas donde la temperatura corporal ayuda a que el aroma se libere lentamente y mantenga su intensidad. En este artículo te contamos cuáles son esos puntos y algunos consejos para maximizar la duración de tu perfume.
¿Por qué aplicar perfume en zonas de pulso?
Las zonas de pulso son áreas donde la piel está más cerca de las arterias y, por lo tanto, la temperatura es ligeramente más alta. Este calor ayuda a que las moléculas aromáticas se evaporen de forma gradual, potenciando la proyección y la duración de tu perfume.
Las zonas estratégicas para aplicar perfume
1. Muñecas
Un clásico y efectivo punto para aplicar perfume. La temperatura en las muñecas ayuda a activar y difundir el aroma durante horas. Pero recuerda no frotar las muñecas después de aplicar para evitar romper las moléculas del perfume.
2. Detrás de las orejas
Esta zona es perfecta porque está cerca de la cabeza y el movimiento natural ayuda a que el aroma se perciba sin ser invasivo.
3. Clavículas y escote
El calor en estas áreas permite que el perfume se libere lentamente, además de que el aroma se mezcla con los aceites naturales de la piel, prolongando su duración.
4. Parte interior de los codos
Una zona menos común pero muy eficaz, especialmente cuando quieres que el perfume se mantenga visible sin saturar.
5. Detrás de las rodillas
Ideal para quienes usan faldas o pantalones cortos. El calor de esta zona ayuda a que el perfume se evapore lentamente, creando una estela sutil al caminar.
Consejos para que el perfume dure más
- Aplica el perfume sobre la piel limpia e hidratada. La piel seca absorbe el perfume rápidamente y reduce su duración. Usar una crema hidratante sin fragancia antes ayuda a fijar mejor el aroma.
- Rocía el perfume a unos 10-20 cm de distancia para que se distribuya uniformemente y no se concentre en un solo punto.
- Evita frotar la fragancia después de aplicarla. Esto puede romper las moléculas y alterar el aroma. Deja que se seque naturalmente.
- Perfuma el cabello y la ropa con moderación. Aunque la piel es el mejor lugar para aplicar perfume, el cabello y la ropa pueden retener el aroma por más tiempo.
- Lleva un decant para retoques. Un toque rápido en las zonas de pulso puede refrescar tu aroma durante el día.
Conclusión
Aplicar perfume en las zonas estratégicas del cuerpo es fundamental para que tu fragancia favorita te acompañe durante horas. Además, cuidar la piel y usar técnicas adecuadas de aplicación potenciarán su duración y proyección. La próxima vez que te perfumes, recuerda estos consejos y disfruta de un aroma duradero y equilibrado.